miércoles, 26 de diciembre de 2012

A MAN, A PLAN, A CANAL, PANAMÁ


En “Vapor”, Max cuenta la historia de un ermitaño, Nic, que se retira al desierto cansado del mundo. Da la impresión de que, en el libro, es el propio Max quien también emprende un camino de renuncia y austeridad expresiva, a la búsqueda de la médula misma del lenguaje de la historieta. Al final, se encuentra con algo irrenunciable: la risa como primera piedra, corazón y fin último de eso que llamamos tebeo.

Esta semana nos titula: Carlos de Diego.

jueves, 20 de diciembre de 2012

DOMINGOS DE CAGAR SANGRE


Jonathan Millán
PUDRIDERO de Johnny Ryan es, más que un comic, un devenir de cosas: cuerpos que interactúan, se absorben y mutan se convierten en la trama misma. Es Cronenberg desatado, un Dragon Ball llevado al extremo. 
Leyéndolo, me hizo pensar en el famoso video de los artistas Peter Fischli & David Weiss llamado The Way Things Go (El Curso de las Cosas), en el que una disposición de objetos cotidianos, agua, fuego y gas creaba una controlada y frágil reacción en cadena que, constantemente, se situaba al límite del caos. En el caso de PUDRIDERO sucede algo parecido, pero de un modo biológico, con cuerpos y fluidos. Al terminarlo tienes la sensación de haber contemplado un nuevo y sólido ecosistema, uno que funciona a base de hostias y escupitajos.
Esta semana nos titula: Paco Alcázar










jueves, 13 de diciembre de 2012

HUMORES MODERNOS


Jordi Costa
Estas imágenes, así como un buen número de ectoplasmas, náufragos, músicos caníbales y demás ocurrencias, han sido sugeridas por la lectura del libro “De buen humor” (Pepitas de Calabaza), la antología que ha preparado Santiago Aguilar, ex miembro de La Cuadrilla (“Justino, un asesino de la tercera edad”, 1994), para hacer justicia al genio de José Santugini, maestro olvidado del humor español de mediados del siglo XX.
Director de una única película –“Una mujer en peligro” (1936)- y uno de los guionistas clave del cine español de la posguerra - “La torre de los siete jorobados” (1944), “Carne de horca” (1953), “Mi tío Jacinto” (1956) o “El cebo” (1959)-, Santugini, junto a Miguel Mihura, Jardiel Poncela, Tono o Gómez de la Serna, fue uno de los adalides de una nueva estética del humor, sofisticada, cosmopolita, civilizada, universal… Eran los tiempos en que la entrada de España en la modernidad –las grandes ciudades, el desplazamiento del campo a la urbe, los espectáculos de masas, el consumo, la tecnología, el papel activo de la mujer- generaban neurosis inéditas, ansiedades de nuevo cuño. En los cuentos de Santugini ese ingreso en la modernidad cristaliza en forma de pesadilla bufa.
Esta semana nos titula: Max

jueves, 6 de diciembre de 2012

CHIKATETSU DREAMS

Jordi Costa
Japón está poblado de autores que parecen llevar el subconsciente por fuera, a la vista de todos. Probablemente, aunque parezcan una panda de peligrosos pervertidos cargados de ideas sucias y crueles, sean las personas más sanas y fiables del Universo.

El último gran hallazgo ha sido Shintaro Kago, de quien Editores de Tebeos acaba de publicar dos libros indispensables. “Reproducción por Mitosis” y “Novia ante la estación”. Kago tiene algo de científico loco: fuerza los límites del lenguaje del manga hasta lo indecible, con sus viñetas que se reproducen por mitosis y enferman en variantes víricas, sus páginas en forma de edificio pesadillesco o sus encuadres que se mueven para revelar significados ocultos y obscenos.
Lo más interesante de todo es que, al final de sus experimentos, Kago parece llegar a la conclusión de que la última partícula indivisible en el tejido de lo Real es… la chorrada, el chiste tonto… lo que, de hecho, podría ser una Gran Verdad… la Verdad Última.
Esta semana nos titula: Pablo Berger